Acércate.

Recuerda que el problema con la locura es que ya no es vista como una virtud.


Bienvenidos

septiembre 06, 2013

Otro año cumplido.

Ya es seis de septiembre, tu cumpleaños. Y aquí estoy, buscando una forma especial para felicitarte, y como en tu día no he podido estar presente, te ofrezco estas palabras (me encanta escribirte) y así te siento cerca, siento que estás conmigo. Cierro los ojos e imagino que puedo abrazarte.

Podría decirte mil cosas, todas tan tuyas y mías, todas necesarias y profundas, infinitas y verdaderas. Un arsenal de ellas. O quizá bastaría con una, repetida y escrita millones de veces hasta que mi voz y mi mano se cansen y no puedan más...

Te amo...Te amo...Te amo...
Te amo...Te amo...Te amo...
Te amo...Te amo...Te amo...

¿Sabes? hace un momento intentaba imaginarte de pequeño, tan frágil y tan fuerte a la vez, lleno de sueños y amor. Envuelto entre los amorosos brazos de tu madre. Tus palpitaciones y tu llanto fundidos en una gran explosión de vida, tan dulce y brutal.

Lo he visto, sí, y he sonreído y llorado de felicidad. ¡He podido sentirlo!

Después, me pareció escuchar tu voz, resonaba en mi como tantas veces, como cuando me siento sola, como cuando me pesa la aflicción, como cuando estoy agotada de vivir y sobrevivir, como cuando me desespero, como cuando no logro entenderme y mucho menos entiendo al mundo, como cuando sufro y al final todo termina. 

Decías: Sécate esas lágrimas, que no estás sola porque yo no me he ido y ni lo haré, ánimo que Dios está con nosotros. Te amo.

Y entonces no creo que sea mía tanta felicidad y corro a abrazarte y a prometerte que seré siempre fuerte, la más valiente y osada. Mientras doy las gracias por tu llegada a este mundo. Mientras te digo...felicidades amor mío, otro año cumplido.




¡Feliz cumpleaños amor!

No hay comentarios:

Publicar un comentario