Los seres humanos somos demasiado complejos,
que de un grano de sal queremos que nazca el mar.
Humanos, estos seres
egoístas y celosos. Se enamoran y se olvidan. Se odian y se despiden. Se matan
y se duermen juntos.
Los seres humanos nunca aprenderemos el valor de la
honestidad. Tuvimos que llegar a herirnos para bloquearnos el corazón,
bloquearnos el recuerdo, la memoria y olvidar pronunciar el nombre de aquel que nos
dio la vida.
No somos perfectos, por eso es que debemos amarnos un poco más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario